Todo ventajas

• Rapidez en la limpieza de suelos, con lo que se ahorra mucho tiempo al empleado que se encarga de dicha limpieza y, consiguientemente, en mantenimiento y costes. 
• Su utilización es muy sencilla. Primero se introduce una solución de agua más detergente en el depósito. Cuando comienza a funcionar, la fregadora va introduciendo esta solución a sus cepillos para a continuación comenzar el fregado. La suciedad recogida acaba en un depósito que se puede extraer de forma cómoda cuando terminas el proceso de fregado. 
• Aptas para rincones y sitios complicados donde un cable se podría enredar con los obstáculos. 
• Las fregadoras industriales automáticas no tienen un mantenimiento complicado. A medida que vayamos utilizando la máquina, veremos que lo más se desgasta son las gomas de la boquilla que van arrastrando por el suelo recogiendo el agua sucia que la máquina aspira hasta el depósito del agua sucia. Y, después, los cepillos de fregado, pero se pueden cambiar sus hojas y sus discos de forma rápida y sencilla. En el caso de las fregadoras industriales automáticas con batería, tan sólo deberemos ponerlas a cargar de nuevo para su próximo uso, una vez se haya agotado totalmente la batería. 
• La productividad aumenta con las fregadoras industriales automáticas, ya que al mantener tus instalaciones limpias reduces la cantidad de polvo y residuos del ambiente y facilitas el paso y la movilidad de los trabajadores encargados de la limpieza y  logras mayor eficiencia en su trabajo.
• Con las fregadoras industriales automáticas se mejora el ambiente de trabajo y la imagen de la empresa. En unas instalaciones limpias, sin restos de suciedad se trabaja mejor. Y, de cara a los demás, tu negocio da una imagen de limpieza, modernidad y efectividad por encima de otros.